Mesa redonda: Cómo contrarrestar el impacto regresivo de la COVID-19 en la igualdad de género

Con motivo del Día Internacional de la Mujer de este año, la OIT rinde homenaje a los enormes esfuerzos realizados por las mujeres para recuperarse de la pandemia de la COVID-19 y forjar un futuro más equitativo.

 

Con motivo del Día Internacional de la Mujer 2021, la OIT propone una reflexión colectiva de alto nivel sobre los desafíos y las oportunidades en la construcción de un programa transformador para la igualdad de género, como se pide en la Declaración del Centenario de la OIT. La conversación hará hincapié en las medidas necesarias para apoyar el papel de la mujer como agente de cambio hacia un camino centrado en el ser humano hacia un mundo de trabajo más igualitario en la pandemia de la COVID-19 y más allá.

Participantes

  • Sr. Guy Ryder, Director General de la OIT
  • S.E. Sra. Saara Kuugongelwa-Amadhila, Primer Ministro de Namibia
  • S.E. Sra. Yolanda Díaz Pérez Ministra de Trabajo y Economía Social de España
  • S.E. Sra. Cecilia Merchán, Secretaria de Políticas de Igualdad y Diversidad del Ministerio de las Mujeres, Géneros y Diversidad de Argentina
  • Sra. Rubana Huq, Presidenta de la Asociación de Fabricantes y Exportadores de Bangladesh (BGMEA) y Directora General de Mohammadi Group
  • Sra. Aya Mezrigui, enfermera de cuidados intensivos y representante sindical, UGTT Túnez
  • Sra. Nozipho Tshabalala, moderatora

Contexto

Con motivo del Día Internacional de la Mujer de este año, la OIT rinde homenaje a los enormes esfuerzos realizados por las mujeres para forjar un futuro más equitativo y recuperarse de la pandemia de la COVID-19. Las mujeres han estado al frente de la crisis de la COVID-19, como trabajadoras esenciales, investigadoras, innovadoras, profesionales de los medios de comunicación, representantes de los trabajadores y empleadores y líderes políticos. Sin embargo, a nivel mundial y en todas las regiones y grupos de ingresos de los países, las mujeres se han visto afectadas por la pérdida de empleo en mayor medida que los hombres. A nivel mundial, la pérdida de empleo de las mujeres se sitúa en el 5,0% en 2020, frente al 3,9% de los hombres.
En todas las regiones, las mujeres han tenido más probabilidades que los hombres de abandonar el mercado laboral y quedar inactivas durante esta crisis. Los trabajadores peor pagados, muchos de los cuales son mujeres, se han visto gravemente afectados.
Las personas con ocupaciones menos calificadas perdieron más horas de trabajo que las personas con puestos directivos o profesionales mejor remunerados. Según estimaciones basadas en una muestra de 28 países europeos, sin los subsidios salariales, las mujeres habrían perdido el 8,1 por ciento de sus salarios en el segundo trimestre de 2020, en comparación con el 5,4 por ciento de los hombres.
La discriminación obstinada, la pesada carga del trabajo de cuidados no remunerado que sigue distribuyéndose de manera desigual y un techo de cristal que muestra una gran resistencia están prolongando las brechas de género en el empleo, al igual que la violencia y el acoso en el mundo laboral. Los efectos de la pandemia entrañan el riesgo de que se inviertan los progresos realizados y se fortalezcan aún más esas brechas, en particular para las mujeres que sufren desventajas y discriminación por motivos múltiples, como el género, la etnia, la discapacidad y otros.
Dadas las tendencias regresivas de género observadas durante la crisis de la COVID-19 y los progresos desiguales hacia la igualdad de género incluso antes de la pandemia, los mandantes tripartitos de la OIT pueden hacer una contribución vital para promover la igualdad de género a través de la formulación de políticas inclusivas, así como la representación inclusiva de género en formulación de políticas. Los mandantes tripartitos deben desempeñar un papel más importante en el fortalecimiento de las políticas de protección social universales y sostenibles, inversión en el apoyo a las familias con trabajos de cuidado y la promoción de las mujeres como líderes, y la garantía de la dignidad y seguridad de las mujeres y los hombres en el mercado laboral para un mejor presente y futuro.